Los hechos atribuidos a cinco miembros de la estructura criminal de la pandilla 18 ocurrieron en diferentes fechas entre marzo y abril de 2019, en la zona del distrito de El Paisnal, en San Salvador Norte, departamento de San Salvador.
Los ahora condenados amenazaron de muerte a dos víctimas, exigiéndoles diferentes sumas de dinero a cambio de no atentar contra sus vidas.
La prueba vertida durante el juicio fue suficiente para que el Tribunal Segundo de Sentencia de Santa Tecla declarara a los imputados culpables y los condenara por el delito de extorsión agravada.
Franklin Romero Guardado fue condenado a 15 años de prisión, mientras que Moisés López Henríquez, Edwin Mancía Orellana y Jonathan Landaverde Gómez recibieron una sentencia condenatoria de 13 años cada uno
El proceso también incluyó a Josué Hidalgo Vides, quien fue condenado a 13 años de cárcel.