El rapero y empresario estadounidense Sean “Diddy” Combs evitó una posible condena a cadena perpetua tras ser absuelto este 2 de julio de los cargos más graves que enfrentaba en un tribunal federal de Nueva York, entre ellos trata de personas y conspiración de crimen organizado. El veredicto se dio tras siete semanas de juicio, en las que 34 testigos declararon en su contra, incluidas exparejas que relataron abusos físicos y manipulación emocional.
Aunque fue exonerado de los delitos que podrían haberle significado pasar el resto de su vida en prisión, Combs fue hallado culpable de dos cargos federales por transportar personas con fines de prostitución, los cuales conllevan una pena máxima de diez años cada uno. Por tanto, el artista de 55 años aún enfrenta hasta 20 años de cárcel, aunque expertos consideran que la condena podría rondar entre 15 y 21 meses.
La defensa de Combs sostuvo durante el juicio que las relaciones descritas fueron consensuadas y que no existió coerción ni explotación, mientras que la fiscalía presentó testimonios de víctimas que aseguraron haber sido manipuladas, drogadas y forzadas a mantener relaciones sexuales.
El juez aún debe decidir si le concede libertad bajo fianza mientras se programa la audiencia de sentencia, cuya fecha aún no ha sido anunciada. Además, Combs continúa enfrentando múltiples demandas civiles, incluida una millonaria por parte de la cantante Cassie Ventura, quien también testificó en el juicio penal.
Este veredicto marca un giro importante en uno de los casos más mediáticos del año, dejando a Diddy libre de los cargos más severos, pero aún bajo la sombra de una posible condena significativa.