El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) confirmó este jueves que el boxeador mexicano Julio César Chávez Jr. fue arrestado por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) el pasado 2 de julio, en California, por su condición de inmigrante ilegal y sus presuntos vínculos con el Cártel de Sinaloa.
Según el comunicado oficial, Chávez Jr. se encuentra bajo un proceso de deportación expedita, tras determinarse que su presencia en territorio estadounidense representa una amenaza a la seguridad pública.
El DHS reveló que sobre el deportista pesa una orden de captura vigente en México por su participación en actividades de crimen organizado, incluyendo el tráfico de armas de fuego, municiones y explosivos.
Durante su detención en Studio City, los agentes federales destacaron que el mexicano tenía un historial de ingreso legal a Estados Unidos en 2023, pero su posterior solicitud de residencia fue rechazada por contener datos falsos y por sus presuntos lazos con el narcotráfico.
La administración del presidente Donald Trump fue enfática en el mensaje: “Bajo esta presidencia, nadie está por encima de la ley, ni siquiera los atletas de fama mundial. Nuestro mensaje a cualquier grupo afiliado a un cártel en Estados Unidos es claro: los encontraremos y enfrentarán las consecuencias”.
“Se acabaron los días de violencia desenfrenada de los cárteles”, agregaron las autoridades del DHS, al recalcar que Chávez Jr. representa un caso emblemático de cómo el crimen organizado ha intentado infiltrar a figuras públicas dentro del país.
El exboxeador permanece bajo custodia federal mientras se tramita su expulsión hacia México, donde será entregado a las autoridades para enfrentar los cargos que pesan en su contra.