Con suficientes pruebas, la Fiscalía General de la República (FGR) logró que el Tribunal Segundo de Sentencia de San Salvador condenara a Ester Leonor Pineda a 35 años de prisión por el homicidio agravado de su hija de 9 años.
Las evidencias presentadas por el Ministerio Público demostraron que la niña sufría maltratos de parte de su madre los cuales culminaron con su asesinato el pasado 10 de octubre de 2023 al interior de su vivienda en la colonia Popotlán 1, Apopa, San Salvador Centro. Después de cometer el crimen huyó del lugar junto a otro hijo menor de edad, pero fue capturada por la Policía Nacional Civil (PNC) un día después del homicidio cuando se encontraba escondida en una colonia Las Flores de Tonacatepeque.
“Llegamos a la colonia Montecarmelo donde vive el padre de esta señora y verificamos que el hermanito menor de esta niña estuviera con vida”, afirmó el director de la PNC, Mauricio Arriaza Chicas, el día de la captura de Pineda.
El cuerpo de la víctima fue encontrado en una cama con “múltiples lesiones” en el rostro, la cabeza y diferentes partes del cuerpo producido con arma blanca; la Fiscalía detalló el día del hallazgo que eran visibles otros golpes, que se presumen, fueron causados días antes de su muerte, y mencionaron que la mujer también se le imputaría la complicidad en el delito de violación en menor e incapaz agravada.
El caso contó con reserva total, sin embargo, durante las primeras indagaciones surgió que la ahora condenada le habría hablado a su mamá, que está en Estados Unidos, para decirle que la niña había muerto, tras «atragantarse cuando comía», sin embargo, la Fiscalía dio a conocer que la condenada habría cometido el crimen en un arranque de cólera porque la niña no quería comer.