El Ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Fernando López, presentó este martes las Perspectivas Climáticas para el periodo de mayo a agosto, en el marco del evento «El Salvador: una nación preparada». Durante su intervención, advirtió sobre los desafíos asociados a la época lluviosa y al incremento de temperaturas en todo el territorio nacional.
“La época lluviosa implica varios desafíos. Trae inundaciones, riesgos de deslizamientos de tierra y desbordamientos de ríos. Trabajamos y generamos la data desde el Ministerio de Medio Ambiente, porque esa es la manera que tenemos para tomar decisiones informadas y que puedan impactar de forma positiva a la población”, expresó el ministro López.
Según los datos presentados, el 2025 ya muestra características climáticas distintas respecto a años anteriores. En febrero se registraron 22.1 mm de lluvia, superando ampliamente el promedio histórico de 4.2 mm para ese mes. Se trata del segundo febrero más lluvioso desde 1971. Hasta la fecha, el acumulado nacional de lluvias alcanza los 78.8 mm.
El funcionario también detalló que las temperaturas han sido anormalmente altas, con un promedio nacional de 33.5 ºC y registros superiores a 40 ºC en puntos específicos del país. Incluso las temperaturas mínimas se han mantenido por encima del promedio.
En cuanto a la condición climática general, el país se encuentra en una fase neutral, sin presencia de los fenómenos de El Niño o La Niña. Esta condición, con anomalías frías, se mantendrá de junio a agosto. “Esto significa que lloverá dentro de los promedios, según las condiciones que se prevén”, aseguró el ministro.
Sobre la temporada de huracanes 2025, el MARN estima que en el Pacífico se desarrollarán 14 sistemas ciclónicos con nombre: 7 tormentas tropicales, 4 huracanes y 3 huracanes mayores. Para el Atlántico se esperan 17 sistemas ciclónicos: 8 tormentas tropicales, 5 huracanes y 4 huracanes mayores. López aclaró que estos datos son proyecciones que pueden variar.
Finalmente, advirtió sobre la posibilidad de una ola de calor durante la canícula, prevista entre julio e inicios de agosto, con un aumento de la temperatura promedio en todas las zonas climáticas del país.