El juicio a Keiko Fujimori, hija del expresidente indultado Alberto Fujimori, inició este lunes en Lima en un proceso que podría extenderse más de un año.
La fiscalía acusa a la líder de Fuerza Popular de financiar ilegalmente sus campañas presidenciales de 2011 y 2016 con dinero de la constructora brasileña Odebrecht.
La fiscalía, encabezada por José Domingo Pérez, quien llegó bajo fuerte resguardo y con chaleco antibalas, ha convocado a unos 1.500 testigos.
La acusación sostiene que Odebrecht entregó 1,2 millones de dólares a Fujimori como parte de un esquema de sobornos a cambio de contratos, dinero que no fue declarado.
La fiscalía solicita 30 años y 10 meses de prisión para la excandidata presidencial, quien enfrenta cargos de lavado de activos, crimen organizado, obstrucción a la justicia, falsedad y declaración falsa en un procedimiento administrativo.
El caso Odebrecht ha salpicado a cuatro expresidentes peruanos, entre 2001 y 2016, incluyendo a Pedro Pablo Kuczynski, Ollanta Humala, Alan García y Alejandro Toledo. García se suicidó en 2019 cuando iba a ser detenido por su presunta implicación en el escándalo.
Keiko Fujimori ha cumplido 16 meses de prisión preventiva durante las investigaciones y ha mantenido su inocencia, alegando que el proceso tiene una intencionalidad política.
Si es hallada culpable y el juicio concluye antes de 2026, Fujimori no podrá postularse a las elecciones de ese año.