En un escándalo que sacude los cimientos del fútbol salvadoreño, el equipo Hércules, recién refundado y luchando en la Primera División, atraviesa una crisis humillante por deudas salariales que obligan a sus jugadores a racionar paquetes de sopa instantánea Maruchan para subsistir durante el mes. «Algunos compañeros jugadores profesionales pasan con paquete de Maruchan para comer en el mes», reveló el capitán y ex ídolo de Alianza FC, Osael Mancia, en una denuncia que ha encendido las redes y provocado un clamor nacional.
La situación, que Mancia describió como «incoherente» e «inaceptable», se remonta a más de dos meses de retrasos en los pagos, mientras los directivos exigen rendimiento máximo en el campo.
«Llegan a exigirte como si estuvieran ellos cumpliendo con su parte… Cómo se van a preparar los compañeros para un partido si están prácticamente hace dos meses sin cobrar», lamentó el zaguero en una entrevista exclusiva para el periódico deportivo El Gráfico. Este no es un caso aislado: el club, que surgió de las cenizas del desaparecido Once Deportivo en mayo de 2025, ya arrastra deudas pendientes del Clausura anterior, incluyendo premios de finales que se adeudan desde hace más de cuatro meses.
Ante la desesperación, los futbolistas de Hércules han decidido unirse y presentar una demanda formal ante la Federación Salvadoreña de Fútbol (Fesfut) y la unidad de resolución de conflictos laborales. «Si no nos hacemos fuertes nosotros (los jugadores), esto va a volver a pasar», advirtió Mancia, llamando a una mayor solidaridad en el sector. La Fesfut, por su parte, ha reiterado que solo puede intervenir una vez que se inicie el proceso legal, pero el caso ha reavivado debates sobre la precariedad en el balompié nacional, similar a los impagos reportados en clubes como FAS.
La afición, indignada, ha inundado las redes con mensajes de apoyo al equipo, que este miércoles enfrenta a Fuerte San Francisco en la jornada 15 del Apertura 2025.