Las declaraciones del analista político Marvin Aguilar han desatado una fuerte controversia al referirse a la diáspora salvadoreña como una “masa moldeable sin capacidad de crítica” y tildarla de “diáspora sínica”.
Según Aguilar, este sector, que en su mayoría apoya al gobierno del presidente Nayib Bukele, muestra un “cinismo estructural” al admirar los cambios en El Salvador, pero no regresar a vivir al país.
Las afirmaciones, difundidas en redes sociales, han generado indignación entre los salvadoreños en el exterior, quienes consideran que sus aportes económicos y sociales son fundamentales para la nación.
Estas palabras han reavivado el debate sobre el rol de los salvadoreños en el extranjero en la política nacional, en un contexto donde las remesas representan una parte crucial de la economía del país.

