La violencia es protagonista desde que comenzó la campaña electoral en México.
A pocos días de que se lleven a cabo los comicios, se registró un asesinado a sangre fría, José Alfredo Cabrera Barrientos, el candidato a la alcaldía de Coyuca de Benítez, municipio del estado de Guerrero.
Este miércoles, la consultora Integralia, que documenta violencia política en este proceso electoral, informó que en el país azteca las agresiones políticas han subido un 150,5 %, hasta un total de 749 víctimas en el actual proceso en comparación con las pasadas elecciones intermedias de 2021.
Dentro de las agresiones, se registran 34 asesinatos de aspirantes, una cifra que se eleva a 231 homicidios al considerar también a funcionarios o exfuncionarios, políticos o expolíticos, familiares y víctimas colaterales.
El Gobierno de México reconoció el martes el asesinato de 22 aspirantes, de los que solo ocho eran candidatos oficiales, aunque grupos independientes contabilizan más, como Integralia, y los 39 de la consultora DataInt.
Las campañas presidenciales terminaron este miércoles para dar paso a tres días de veda electoral en México, que el domingo tiene las elecciones más grandes de su historia con más de 98 millones de personas convocadas a renovar más de 20.000 cargos, incluyendo la Presidencia, los 500 diputados y los 128 senadores.