Autoridades de Guatemala, entre ellas el mismo presidente, Bernardo Arévalo, ha confirmado que cientos de mexicanos han comenzado a llegar al vecino país intentando escapar de la violencia que se vive actualmente en Chiapas.
Los habitantes de comunidades de la Sierra Madre de Chiapas, ingresaron a territorio guatemalteco caminando por caminos extravíos, para luego tomar un tramo de terracería que rodea el río Cuilco, que en México se le conoce como Grijalva, después que el martes 23, un grupo del crimen organizado irrumpiera en el poblado San José municipio de Amatenango de la Frontera y los amenazara con rifles, desalojándolos de sus casas.
Entre los identificados son cientos de hombres, mujeres y niños; familias completas que quieren huir de grupos criminales que operan al sur de México; así lo confirmó el Presidente Bernardo Arévalo, quien explicó en rueda de prensa durante la visita a la construcción de un hospital en el departamento de Sololá, que las familias mexicanas que cruzaron la frontera «están escapando a la confrontación entre grupos que tiene lugar del lado de México».
De acuerdo con la información que dio el primer mandatario, la gente originaria del sur de México se está resguardando en Cuilco, Huehuetenango, Guatemala causado por grupos de la delincuencia organizada, quienes desde el pasado 14 de julio mantienen enfrentamientos por la disputa de la franja fronteriza.
La gobernadora del departamento de Huehuetenango, Elsa Hernández, reportó que los desplazados están llegando con pocas pertenencias a los municipios de Cuilco y Chiantla, por lo que necesitan apoyo humanitario, como la instalación de albergues, alimentos y medicamentos, señaló al periódico Prensa Libre.
Por su parte, un funcionario del gobierno de Chiapas consultado quien no quiso dar su nombre aseguró que no tienen conocimiento sobre el desplazamiento de las personas hacia territorio guatemalteco. “Ningún reporte, de algún ente social o político, organizaciones o alcaldes”, dijo el funcionario.